Capítulo 11

Germán no puede con su cara de felicidad después de haber hecho el amor con el amor de su vida. Está feliz y satisfecho. Mira a su amado con mucho amor. No le importa nada. Sólo ese hombre. Muy sofocado, Darío  se levanta y mientras se empieza a vestir dice rabioso:

--flor de putita sos y te haces el ofendido. Pendejo. Y tú sabes que estoy casado, que soy el marido de tu nuevo hermano. Eso dice mucho en tu favor y nada bueno.
Germán  siente como si le clavaron un puñal. No dice nada. Se siente herido y humillado. Darío  está muy aturdido, está molesto con él  pero le duele verlo sufrir. Sale muy sofocado. Cierra la puerta y le atormenta oír llorar al hombre que ha ofendido y ha amado:

--¿qué me está pasando?¿qué?  --se pregunta sin entender sus sentimientos

En la otra habitación, tanto Emilio  como Pablo están en las nubes. Éste último porque nunca estuvo en una cama tan blandita y el primero porque le encanta el cuerpo de su nuevo compañero de cuarto.

--¿te gusta la cama? --le pregunta Emilio  muy nervioso y para hacer conversa.

Dando saltitos aún tumbado, el guapo hermano de Darío,  dice:

--Supongo que yo duermo en la pequeña.

--Las dos son muy cómodas pero no, duerme tú en la mía.

Pablo le obsequia a Emilio  con su más seductora mirada que lo fascina.

--¿Seguro que no te importa? no quiero ser latoso --pregunta muy simpático.

--No tengo amigos así que me gustará tener uno.

--¿y eso? ¿cómo es que no tienes amigos?

--bueno, es que a mi lo que más me gusta es escribir, me la paso escribiendo y claro no tengo tiempo de nada más.

--pero si tienes novia ¿ no?.

Emilio  está muy nervioso, a parte que no quiere que nadie conozca su secreto teme que Pablo no quiera dormir con él y no lo pueda ver desnudo algo que le apetece mucho. Hace que no con la cabeza.

--A mi me puedes hablar en confianza. ¿Sos gay?

Emilio se pone nervioso y Pablo se le ríe.

--yo soy hetero pero no me importa que seas gay.  ¿Tu padre sabe?

--si, si. Germán también es gay. No le gusta que hablemos de eso pero no se mete con nosotros.

Pablo le ríe con complicidad, le da una palmada en los hombros.

--¿y donde los traes? 

--¿a quienes?

--¿cómo qué a quienes? ¿dónde lo haces?¿puedes  traer pibitos? Seguro que traerás alguno ¿tu padre no te deja?

--bueno... es que yo... bueno...

-no serás virgen ¿No? --pregunta divertido.

--¡no, claro que no¡

--bueno menos mal,  no es que a mi me importe pero es para saber con quien duermo.

-- claro he estado con muchos, a mi me encantan las hombres

Pablo le sonríe con complicidad:

--soy muy hetero pero me caéis muy bien los gays.  Tú y yo nos vamos a llevar muy bien ¿y bueno? ¿dónde los llevas? ¿Tienes sitio? ¿tienes auto?

Emilio  se pone nervioso. Casi no le sale la voz:

-- sólo lo he hecho en lavabos públicos .

Pablo siente asco por ese hombre pero le interesa tenerlo de su lado. Sabe que es deseado por él y quiere tenerlo dominado.  Le vuelve a preguntar si tiene coche.

--es que no sé conducir.

--pues si yo tuviera un padre con dinero... lástima que no tengas coche,. podríamos salir de fiesta.

Pablo le habla con confidencialidad:

--mira, en plan amigos. Yo tengo una mina... Es una de esas putillas que no quiero que nadie me vea con ella ¿dónde le hago? ¿cómo le haga para tener relaciones  en esta casa sin que me vean ?

--ah, en el cobertizo, al lado de la piscina. En la noche, no hay nadie.

Pablo mira el ordenador.

--¿tienes Internet? --Emilio  hace que sí con la cabeza-- ¿Puedes entrar en páginas guarras?

--Si claro.

Emilio  no cae en eso pero Pablo al ver las últimas direcciones se da cuenta que visita páginas porno gay y de encuentros pero no le dice nada. Le interesa tenerlo de su lado.

--yo tengo uno viejo. Este lo puedes usar como si fuera tuyo --Emilio .

Pablo lo mira fijamente, le pone la mano en el muslo y Emilio está ardiendo 

--Por cierto, ¿eso es un baño? me estoy meando.

Emilio  está muy cachondo. Ese hombre lo ha vuelto loco.

--wow, tienes baño propio.

--si, en cada habitación.

Pablo entra. Emilio  lo mira con disimulo aunque no le logra ver nada y eso lo frustra. Desea ese hombre. Ese cuerpo. Se conforma con verlo desnudo pero no hay suerte y eso lo frustra mucho. Pablo, en el baño, está feliz por el lujo. Emilio  se excita al verlo hacer pis. Está en la puerta. Le excita los movimientos  que hace con ls mano. Y luego ya frente a él como se sube la cremallera pero lamenta no habérsela visto.

-como el hermano, que mala suerte--piensa para sí-- Espero que no sea tímido, espero que no me quede con las ganas, que ganas de ver a un macizo buenorro como este desnudo y es que si no has visto uno de estos no has visto nada. El hermanito está como quiere pero este no se puede quejar pero de nada, que pena no tenerlos a los dos encerrados en la misma habitación para poder tirar la llave. Pablo siente el deseo de Emilio , se da cuenta de cómo lo está examinando con la mirada y aunque es algo que le molesta sabe que se podrá aprovechar de él.

-tiene cara de tonto --va diciendo para si.-- a este se la enseño y le saco hasta el hígado.