jueves, 4 de junio de 2020

Capítulo 30 y ultimo

Emilio  ya se ve muerto en manos de Pablo.
pero alertado por los gritos de Emilio  una vecina ha llamado a la policía y llegan a tiempo para impedir una tragedia. Mientras unos se llevan esposado a un enloquecido Pablo los otros atienden a Emilio .


Emilio , muy débil. Recobra el conocimiento en el hospital. Darío  está a su lado. Lo mira sonriendo. Lamenta mucho todo lo que ha sufrido por su hermano:
--Perdoname, ya nadie te hará daño. Mi hermano está preso, yo dejé esa casa, ya no tengo familia. Sólo a ti. Alquilaré un piso y viviremos los dos juntos como hermanos,yo me encargaré de ti.
--¿después de lo que te hice? --pregunta confundido.
--todo está olvidado -le dice sonriendo.
Darío  le toma de la mano y Emilio  le dice:
--ojalá fueras mi hermano, ojalá nunca te hubiera traicionado. Nunca debí hacer caso a tu hermano.
Darío besa su mano. Lo acaricia. 
--ya no pienses en eso, ya no.
--pero Germán ...
--todo se arreglará.
Darío  trata que Emilio  no se angustie pero no puede evitar una mirada llena de dolor pensando en su amada, en si la volverá a ver.

1 año después...
Renata visita a su hijo en la cárcel.
--¡¡me tienes que sacar de aquí ¡
La mujer esta desesperada.
-- lo hemos perdido todo. Ya no hay dinero para abogados. Vivo en una pensión. Con lo poco que gano con mi trabajo apenas vivo.
Javier está furioso.
--¿qué hiciste con mi dinero? ¡había mucho¡
--gasté una fortuna en abogados. Me asesoraron mal en la inversiones. Hijo no lo estoy pasando bien.
Javier descarga su ira contra su madre.
--¡¡yo estoy peor¡¡me ahogo en esta ratonera¡¡¡¡haz lo que te dé la gana pero me sacas de aquí¡
--hijo, has matado a mi esposo. Tu condena será dura.
Renata es una mujer destruida. Javier la insulta. La echa del lugar. Renata se va llorando.

Darío  y Emilio  llegan con sus maletas a la casa de la familia del segundo. Emilio  está muy emocionado. Darío  disfruta viéndolo tan contento por volver a la casa en la que  creció. 
--gracias, gracias por comprar esta casa.. Yo trataré de ayudarte para pagar la hipoteca.
--yo sé que esta casa es muy importante para ti y para Germán. No quiero que se pierda y bueno trabajo en una clínica importante, podré salir adelante.
--pero yo pondré mi sueldo, jefe.
--no hace falta.
--quiero hacerlo.
Darío  le sonríe. Saca de su bolso de mano la foto de Germán  con su madre enmarcada. Los dos hombres miran esa foto con cariño y se abrazan.
--Germán  volverá, ya lo verás.
Darío  lo mira lloroso:
--¿y si ya me olvidó?
--claro que no. Germán  no pudo olvidar al mejor tipo del mundo.
Darío  le agradece sus palabras. Se miran con mucho cariño.

Javier vuelve a su celda. La comparte con Pablo. Siempre discuten.
--¿porque me tuviste que acusar?
--porque no me iba a pudrir aquí yo solo. La idea fue tuya.
--¡te odio¡
Y lo besa. Y hacen el amor. Unos presos los interrumpen.
--que golosos. No sean egoístas. Ya inviten...
Se ponen agresivos. Los separan y entre varios los sujetan. Los inmovilizan y tapan la boca con calzoncillos muy sucios. Javier y Pablo gritan de dolor y desesperación mientras decenas de presos los violan sin piedad. Y van llegando más. Disfrutan de esos dos y se ríen.
--Aquí no están de luna de miel. Sois nuestras putitas. Tendréis todos los machos del penal para vosotros, estaréis todo el día cogiendo pero no entre vosotros.. . Ni os veréis. Vuestros culitos nos pertenecen a todo el penal. Ya sé, no nos deis las gracias. Sabemos que es un sueño para vosotros...disfrutadlo.
Javier y Pablo lloran sangre. Se han convertido en las muñecas hinchables del penal.

Al rato, Emilio  entra en la casa.
--mira lo que tenía guardada la vecina.
 saca un sobre:
--Me llegó una carta es de Germán ...
Darío  le arranca el sobre para ver si pone la dirección de él . La cara se le ilumina al ver que sí.
--¿le escribo o ya le llevas la carta tú directamente? --Emilio  con complicidad.
Darío  suspira enamorado.
--¿y si ya me olvidó?
--confía más en tus encantos. Quien te amó, te amará para siempre.
Darío  tiene el rostro desencajado pero de la felicidad. Besa esa sobre, lo huele.
--Germán , mi amor. Te volverá a ver,  te volverá a ver.
Darío siente que el corazón se le va a salir por la garganta. Abraza a Emilio entusiasmado. Lo besa en la frente 
--te quiero hermano, espero que seas feliz con mi hermano después de todo --Emilio.
Darío  le agradece sus palabras. Está entusiasmado.

Sin imaginar todo lo que está pasando, Germán está  trabajando con los Niños Pobres del Chaco. Da clases en una escuela para niños pobres. Mientras recoge sus cosas alguien llama a la puerta.
--Pasa.
--buenos días, maestro.
Germán  se queda helado al ver a Darío  ante él .
--¿que haces aquí? --le pregunta perplejo.
A pesar de la separación el amor sigue prendado en el corazón de los dos, Darío se le acerca sonriendo muy seductor y Germán se muere de amor. Muy dulce Darío le dice:
--tengo muchas cosas que contarte pero ante todo una ¿te quieres casar conmigo?
--esto es una broma ¿no?
--soy un hombre divorciado.
--pero...
--Ahora no... luego te lo cuento todo... han pasado muchas cosas... sé que estás haciendo mucho por estos niños pero ya es hora que te ayudes a ti, a mi a nuestra felicidad... ¡casate conmigo¡
Germán  lo mira como en shock, no puede creer que él está ahí de verdad.
--te amo, te he echado de menos --le dice Dario con dulzura.
--no puedo creer que hayas recorrido tantos kilómetros para verme.
--no solo para verte,  quiero que vuelvas conmigo y que formemos un hogar. Juntos podemos ayudar a otros niños. Siempre hay niños necesitados. 
Germán no se atreve a tocarlo porque no cree que sea real y teme que desaparezca y Darío lo besa. Se besan porque los dos se tienen que convencer que están juntos.














Días después...
Germán  y Darío  entran en su casa.
--Ha cambiado todo tanto... no me puedo creer que... --dice Germán con tristeza mirando la foto que hay de él  con su madre.
Darío  lo abraza:
--no quiero que pienses en cosas tristes -- le dice él.
Mira una foto de su padre con Renata y dice él :
--Mañana hablaré con Renata., quiero que viva con nosotros. No importa lo que hiciera su hijo. No es culpa de ella, es la viuda de mi padre y este es su lugar.
Darío  lo acaricia con ternura:
--claro que sí, pero mañana eso será mañana... 
Los dos se miran picaros... Darío le toma la mano y la lleva hasta su cuarto. El cuarto que fue de sus padres y  que ahora está lleno de flores y corazones de papel y una cama de agua.
--¿Tu has hecho todo esto? --Germán  maravillado .
--Si para, ti para mi futuro esposo. .. para el hombre de mi vida.
Darío  le entrega su diario.
--lo guardé para ti.
Germán lo tira al suelo:
--ya no me hace falta, te tengo a ti.
Los dos ríen de felicidad mientras caen a la cama y hacen el amor con dulzura y pasión. Después reposan desnudos el uno en brazos del otro:
--ahora que es nuestra primera vez oficial... como casi esposos, sin culpas ni broncas no lo encuentras aburrido ¿no? --dice Germán  divertido.
--Nunca me aburro contigo y menos en la cama- se besan-- te amo... quiero envejecer a tu lado.
Germán lo mira enamorado.
--yo no sé si me acostumbraré a verte en el cuarto desnudo. Eres un provocador.
--mira el que habla.
 Los dos se besan, se ríen. Se disfrutan.

Suenan campanas de boda en la montaña, Germán , de blanco, camina hacia el altar del brazo de su hermano. Dario, también de blanco, junto a Renata que vuelve a sonreír. Emilio  y Darío  se abrazan contentos antes de que el primero le entregue a su hermano. Germán  y Darío se agarran de las manos.  Lloran de felicidad después que el oficiador diga aquello:
--Darío , Germán ... ya sois marido y marido…
Y se besan y se abrazan. Se aman y sobretodo disfrutan de su felicidad, de su amor. Una felicidad ahora sí eterna
Fin.

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